Somos nuevamente testigos de la visita de Estado de un presidente norteamericano, un presidente norteamericano que ganó en su país apoyado por un sector más “demócrata”, un presidente norteamericano que ganó en su país prometiendo y prometiendo reformas y acciones que velarían tanto por los derechos humanos como por la paz, un presidente norteamericano que, a pesar de aquello o por la misma razón, es igual al resto de los presidentes norteamericanos.
Obama se nos presenta como el presidente que le cambió a Latino América el pensamiento que tenía de Estado Unidos, pero no hemos visto desde hace mucho tiempo un cambio real en la política de dicho país con el resto del mundo. Pero claro, de esto no nos damos cuenta; la telenovela de la tarde nos ciega de las violaciones a los derechos humanos del gobierno norteamericano, nos ciega de todos los presos políticos que están siendo violados moral y humanamente en Estados Unidos, como es el caso de “Los Cinco” cubanos retenidos en cárceles norteamericanas que esperan hace años juicios justos, sin privilegio a los derechos más básicos del ser humano, sin la posibilidad de ser visitados por sus hijos y esposas; como es el caso de los detenidos en Guantánamo, presos “terroristas” por sospecha, donde se les tortura y humilla con tratos vejatorios; como la incontable cantidad de violaciones de mujeres y niños, de asesinatos y masacres en Medio Oriente; como la cobarde intervención política y económica en países sub desarrollados, todo por más dólares en sus repletas cuentas; como los cínicos discurso y difamas de sus gobernantes contra todo lo que atente a sus intereses. Bueno, ahora recibimos con los brazos abiertos a un verdadero autor intelectual de todos estos actos criminales ¿Será que Interpol lo detendrá en el aeropuerto? No, lo recibimos con amabilidad y admiración -por lo menos nuestro Gobierno lo hará-, sobándole el lomo a nuestro protector, a nuestra Metrópoli, si, nuestra Metrópoli, ya que seguimos siendo su colonia, seguimos dependiendo de ellos, seguimos recibiendo sus órdenes ¡Qué lindo que es éste sistema!
No quedándonos solo allí, también firmaremos un convenio sobre energía nuclear. Ay qué lindo: “Los científicos yanquis vienen a ayudarnos con nuestro desarrollo” No, el tratado especifica más un acuerdo que obliga a Chile a no desarrollar armamento que pueda ser ocupado en contra de las esferas económicas del mundo, así seguimos protegiendo a los países ricos.
Obama viene a hablar también de derechos humanos. ¡Por favor! ¿Puede el hablar de derechos humanos cuando apoya una nueva guerra en Medio Oriente, cuando mantiene secuestrada a gente en su país, cuando tiene una prisión donde se tortura y se violan derechos básicos? Eso es hipocresía, pero no nos sorprende, ya que la hipocresía es la principal máscara de la avaricia, del egoísmo y del abuso.
No sigamos creyéndole el cuento a los noticiarios (quienes justifican la matanza de mujeres y niños en Libia), no sigamos pendiente sólo de la novela; démonos cuenta de la realidad, que dejar que nos cieguen es avalar los crímenes que comete este señor y todos sus guardianes.
Respetuosamente, Obama go home.
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